#ElPerúQueQueremos

"Hay que..."

Publicado: 2011-11-21

Compromiso con la sostenibilidad

Por Jorge Melo Vega, gerente general de Responde.

Hemos tenido la oportunidad de participar en los meses recientes en distintos conversatorios, talleres y conferencias para abordar el tema de la promoción de la sostenibilidad. Ya no queda duda de los beneficios que trae para la sociedad su adecuada gestión pero la gran tarea pendiente es cómo comunicamos este modelo  para su puesta en práctica en todas las organizaciones y, especialmente, en las distintas instancias del sector público.

Somos conscientes de los enormes beneficios que nos traería si lográsemos que los encargados de compras en las empresas y demás instituciones se preocupasen de priorizar más allá  del precio, que la empresa a la que le compran  respeta los aspectos laborales, ambientales o  tributarios. Las grandes empresas sí lo vienen  haciendo, pero la gran mayoría definitivamente no lo hace: “no es mi problema y yo tengo que comprar barato”.

Y es que profundizar la responsabilidad social en nuestro país es mucho más difícil que en  otros debido a que somos una sociedad con  un bajo nivel de civismo, nos cuesta mucho  confrontar a otros cuando hacen algo indebido. Qué hacemos, por ejemplo, cuando vemos  que alguien bota basura desde el auto o en la  calle, qué cuando alguien cruza la calle indebidamente, qué cuando el chofer del bus se detiene en cualquier parte. Hay una larga lista de  evidencias que nos demuestra que somos muy  permisivos y no confrontamos las inconductas  ciudadanas probablemente para no hacernos  problemas. Pero en realidad nuestra inacción  sí nos está perjudicando a todos.

En la gran mayoría de países incluso de igual  o menor desarrollo que el nuestro, los fundamentos ciudadanos se convierte en el impulsador de mejores prácticas en responsabilidad  social. El respeto a la norma, a la autoridad o  al vecino, permite entender mejor que la gestión sostenible trae mayores beneficios y por  tanto las empresas y los funcionarios públicos  saben que deben mejorar, porque el mercado o  los ciudadanos así se lo demandan. No es ese  nuestro caso y por ello diseminar la RS resulta  más difícil. Si somos permisivos con la informalidad que nos rodea y la promovemos, difícilmente podremos demandar buenas prácticas y por tanto las organizaciones no tienen que esforzarse por ofrecérnoslas.

En los diferentes espacios que tratamos sobre  estos temas surgen innumerables iniciativas  precedidas en el “hay que”. Creemos que esa  premisa ya no nos sirve porque terceriza la acción en nadie, esto es que si el esfuerzo ciudadano no se organiza o impulsa por parte de  quienes sabemos que debemos movilizarnos el “hay que” es casi un sinónimo de “no es mi problema”. Priorizar e impulsar iniciativas que nos  confronte para reaccionar y llamar la atención  al que comete una falta que está perjudicando  a la comunidad, permitirá que todos, incluido al  que le llamamos la atención, vivamos en un entorno ciudadano de constante mejora. Este es  el mejor cimiento para impulsar nuestro propio  modelo de sostenibilidad.


Escrito por

Responde

Somos una consultora que promueve la gestión de la reputación y la sostenibilidad a partir de productos estratégicos elaborados a la medida


Publicado en

Responde

Responde, consultora en Sostenibilidad y Reputación